Ecos de Sumer, cuaderno de edición escrito por Antonio Adsuar
Hola amigos. Estos días he estado reflexionando sobre la importancia de twitter en mi día a día. Y es que me he dado cuenta de que twitter es mi forma de ordenar en el mundo de los contactos profesionales y de la información que me interesa.
Hacía tiempo que no leía nada sobre esta red social así que he comenzado el libro «La verdadera historia de twitter» de @NickBilton (ed.Gestión 2000). Aunque solo he recorrido la mitad de sus páginas su lectura me ha recordado al mundillo que ya exploré al leer cosas sobre Steve Jobs, fundador de Apple y M.Zuckerberg, de Facebook.
Creo que para entender la revolución digital que estamos viviendo es fundamental conocer el origen de internet, y más específicamente el contexto cultural del que provienen las grandes compañías-red.
Esta cosmovisión la he querido denominar «ética hacker», sin que quiera darle a este último término ningún matiz peyorativo. ¿En qué consistía esta forma de vida y de entender las relaciones de aquellos fundadores del pre-internet que campaban por EEUU en los 60, 70 y 80?. Vamos al lío:
1.Eran jóvenes, idealistas, desclasados, gente sin nada que perder
2.Eran activistas sociales, influidos por las ideas anarquistas y la ideología hippy
3.Rechazaban la formación tradicional y las enseñanzas clásicas, casi todos dejaron la universidad. Eran disruptivos, chicos malos, no querían encajar, se creían los más listos
4.Defendían la necesidad de tumbar la propiedad intelectual. Para ellos todo el conocimiento debería fluir por la web libremente y todo debía ser compartido con la comunidad
5.Frente a una definición de verdad cerrada, elitista, definida desde las capas altas intelectuales ellos defendían una «verdad de la multitud», construida conjuntamente (tipo wikipedia, una «wiki-verdad»)
6.Estas ideas dieron lugar a empresas como Google, donde el resultado más visitado, independientemente de quién avale lo que se afirme en él, es el primero que sale en los resultados de búsqueda
Toda esta manera de concebir la sociedad se plasmó en la «forma-web» tal y como la conocemos hoy. Fijémonos que estos postulados anteriores se repiten una y otra vez en las empresas .com exitosas
Frente a esta «ética hacker», ¿Qué caracterizaba a la dicotómica «ética editorial»?. A ver…
1.La gente que defiende esta cosmovisión clásica son de mayor edad y defendían en muchos casos posiciones de poder en instituciones clásicas (periódicos, universidades)
2.Se trataba de grupos que creían en la educación reglada, en los títulos académicos tradicionales, en la promoción social de aquellos que copiaban el modelo de sus padres
3.Defendían, por ende, la propiedad intelectual. Creían que las obras tenían gran valor, sobre todo las clásicas, y habían de ser respetadas. El trabajo del creador había de ser remunerado adecuadamente y traficar con contenidos protegidos en la red era piratería según ellos
4.La «verdad de las multitudes» les parecía una aberración. El conocimiento no era una mera cuestión democrática, existían unos parámetros identificados y fiables que determinaban lo que era sabiduría y lo que era mero chismorreo de la masa
5.Todas estas ideas estaban detrás de las obras clásicas: libros, enciclopedias, periódicos, ponencias bien fundamentadas, etc.
Creo que se podría decir que «el gran tótem cultural» de este bando era y es «el libro». Como observamos nos encontramos ante dos culturas enfrentadas, que opino que encierran una considerable cantidad de verdades cada una.
Como sé que este blog de Ecos de Sumer lo leéis fundamentalmente gente del sector editorial he sido deliberadamente benévolo con los «hackers» y algo más crítico con los «editores». Quiero con ello provocar la reflexión y el debate.
Para concluir quiero afirmar lo siguiente: la revolución digital se basa en una forma de ver las cosas muy relacionada con el mercado, muy propia de EEUU.
-«Démosle al a gente lo que pida, en esto consiste en bussines»…gracias al apoyo de la mayoría estas gurús jovencísimos han hecho millones y han revolucionado el mundo.
Frente a un EEUU entusiasta tenemos a una Europa más grave y tradicional, que aún controla la mayor parte del sector editorial, aunque vive bajo el peso de una amenaza de desintermediación tecnológica creciente.
Opino, como persona optimista, que aquellos que amamos el libro y la lectura tenemos que reinventarnos, defendiendo los puntos fuertes de la «ética editorial» pero sin dejar de acercarnos e imitar las virtudes de los que, desde la «ética hacker», están cambiado el mundo.
Además, y esto es muy importante para respaldar nuestra posición, las empresas de internet actuales han traicionado la «ética hacker» para construir imperios espía-publicitarios, como denuncia Jaron Lanier.
Por último, vuelvo a recomendar, como hago desde hace años la lectura del texto «Parásitos, how digital parasites are destroying the culture business and how the culture business can fight back” de R.B. Levine.
Si sois autores, editores, libreros y bibliotecarios y queréis saber más sobre cómo digitalizaros en la era-red, os invito a conocer «La odisea del libro, la transición digital».
Si quieres explorar o comprar «La odisea del libro» clica la imagen de abajo
▼▼